El cuerpo cuenta con una serie de sustancias sintetizadas en las glándulas, cuya principal función es mantener la homeostasis o equilibrio del organismo. Todas estas sustancias llevan el nombre de hormonas. Una de las más importantes es la tiroxina. Las patologÃas asociadas a las hormonas aparecen por un error en los procesos de sÃntesis o de liberación de las mismas.
¿Qué es la tiroxina?
También conocida como tetrayodotironina o T4, la tiroxina es una hormona formada por yodo y se sintetiza y libera desde una glándula ubicada en la región anterior del cuello. La misma tiene una estructura quÃmica particular, compuesta por la condensación del aminoácido tirosina, al que se le añaden 2 átomos de yodo.
La cantidad de T4 producida en la glándula correspondiente es mucho mayor en relación con las otras hormonas sintetizadas, sin embargo, cuenta con poca actividad biológica. Múltiples estudios establecen que la tiroxina se comporta como una prohormona en la periferia, es decir, que debe transformarse en su forma activa por una acción enzimática.
¿Cuál glándula es la encargada de producirla?
El órgano encargado de producir y liberar la tiroxina al torrente sanguÃneo es la glándula tiroides. La misma está ubicada en la región anterior del cuello, justo debajo de la laringe y por delante de la tráquea. La anatomÃa de la tiroides asemeja un escudo: cuenta con 2 lóbulos ubicados a ambos lados de la tráquea, unidos por una región central llamada istmo.
En condiciones normales, esta glándula pesa alrededor de 20 gramos y no suele ser palpable. La principal función es la producción de diferentes hormonas, entre las que destacan la T4 o tiroxina y la T3 o triyodotironina.
¿Cuál es la función de esta hormona?
La principal función de las hormonas tiroideas está relacionada con el metabolismo y el crecimiento del cuerpo humano. No obstante, la tiroxina cuenta con una actividad biológica menor y una vida media mayor que la triyodotironina. Estas caracterÃsticas convierten a la T4 en la sustancia ideal para mantener una reserva constante.
En términos generales, se puede decir que la triyodotironina será la forma activa de las hormonas tiroideas, mientras que la tiroxina funcionará como la reserva plasmática. Cuando el organismo posea niveles bajos de T3, diversas enzimas en los tejidos periféricos extraerán un átomo de yodo de la tiroxina, transformándola en su forma activa.
Estudios establecen que las hormonas tiroideas tienen una participación funcional muy importante, incluso desde la vida intrauterina.
Enfermedades relacionadas a la deficiencia de tiroxina
La principal afección relacionada con la deficiencia de tiroxina y triyodotironina es el hipotiroidismo. Esta es una patologÃa definida como la disminución del efecto de las hormonas tiroideas a nivel tisular. La causa más común es una disminución en la producción o liberación de hormonas tiroideas, aunque también puede aparecer por resistencia periférica.
El hipotiroidismo puede ser primario o secundario. Se dice que es primario cuando existe una disfunción en la propia glándula.
Entre las principales causas de hipotiroidismo destacan las siguientes
Enfermedad de Hashimoto.
TiroidectomÃa.
Tratamiento radioactivo y ciertos medicamentos.
Demasiado o muy poco yodo en el cuerpo.
La deficiencia de hormonas tiroideas puede generar la aparición de otra condición denominada bocio, la que no es más que un aumento en el tamaño de la glándula tiroides.
Enfermedades relacionadas al exceso de tiroxina
El exceso de tiroxina y triyodotironina en el torrente sanguÃneo es una patologÃa conocida como hipertiroidismo.
Entre las principales patologÃas capaces de causar hipertiroidismo destacan las siguientes
Enfermedad de Graves-Basedow.
Bocio multinodular tóxico.
Adenoma tóxico.
Tiroiditis.
Esta patologÃa es capaz de aumentar el metabolismo basal del cuerpo humano, por lo que todas las funciones del organismo estarán aceleradas. En este sentido, las personas pueden experimentar palpitaciones, nerviosismo, pérdida de peso y aumento en la sudoración.
Una hormona esencial para el organismo
La tiroxina es una hormona producida en la glándula tiroides que puede transformarse a su forma activa en los tejidos periféricos, por lo que es una fuente de reserva.