Miles de personas en todo el mundo son alérgicas a diferentes sustancias como alimentos o medicamentos. Algunos son alérgicos a los perros y gatos, lo que les impide tener mascotas.
Las mascotas pueden ser los mejores compañeros para muchas personas, los perros y gatos son los animales más comunes en los hogares. Sin embargo, algunos se limitan a compartir con ellos debido a las reacciones saludables que producen.
Las alergias son reacciones excesivas del sistema inmunológico a sustancias o componentes dañinos que se consideran dañinos del mundo exterior. Estas condiciones generalmente están relacionadas con la genética y las características estructurales de cada persona. Además, su aparición tiene diversos efectos sobre la calidad de vida.
Los animales domésticos a menudo liberan sus propias células o sustancias en el medio ambiente. Cuando están en contacto con personas susceptibles, pueden desencadenar una respuesta inmunitaria inapropiada. Los síntomas asociados con las alergias a perros y gatos son diversos.
¿Cómo se producen las alergias a perros y gatos?
Las reacciones alérgicas en las mascotas a menudo muestran reacciones similares a otras formas de alergia. Los cuerpos extraños o alérgenos pueden inducir diversos síntomas según los órganos que se toquen y el tiempo de exposición. En este sentido, las personas alérgicas experimentarán manifestaciones locales o sistémicas.
Es claramente visible localmente a nivel de la piel, membranas mucosas y sistema respiratorio superior. Algunos de los síntomas destacados en pacientes alérgicos a perros y gatos son los siguientes:
- Estornudo
- Ojos enrojecidos y llorosos.
- Congestión nasal.
- Tos seca.
- Picazón en la nariz y la piel.
- Ampollas o urticaria.
- La piel se enrojece
Por otro lado, cuando la hipersensibilidad es muy exagerada, puede provocar cambios sistémicos. Pueden causar graves consecuencias a los pacientes y deben identificarse y tratarse a tiempo.
Entre este tipo de síntomas destacan los siguientes puntos:
- Dificultad para respirar
- Dolor u opresión en el pecho
- El silbido al respirar.
- Disminuye la presión arterial.
- Hoyo del corazón
- Náuseas, mareos y vómitos.
¿Es el pelo el culpable de las alergias a perros y gatos?
Aunque la mayoría de la gente cree que el pelo de las mascotas no es responsable de las reacciones alérgicas. Por su parte, lo que se asocia a este tipo de respuesta inmunitaria son las células muertas o la caspa desprendida del animal.
Las partículas de caspa permanecen en el aire y en la habitación durante mucho tiempo. Esto explica por qué incluso si la mascota no está en la habitación, una persona puede experimentar alergias en la habitación. Además, estas partículas pueden adherirse a la ropa u otros objetos y ser transportadas a pacientes susceptibles.
De manera similar, pueden ocurrir reacciones alérgicas debido a la exposición a proteínas presentes en la saliva y la orina de perros y gatos. Estos están en contacto directo con las personas o son transportados a la mucosa a través del aire, donde se consideran alérgenos.
¿Hay mascotas hipoalergénicas?
Actualmente, existe un grupo de razas de perros y gatos que se consideran hipoalergénicas, es decir, no producen reacciones alérgicas en pacientes susceptibles. Sin embargo, esta hipótesis carece de base científica.
Cada mascota tiene la capacidad de producir alérgenos. Es posible que algunos animales no liberen la misma cantidad de partículas, pero están ahí.
Por otro lado, se han identificado pacientes alérgicos a perros y gatos con solo ciertos síntomas de la raza. La capacidad del cuerpo humano para adaptarse a estímulos constantes y la capacidad de ciertas razas para liberar niveles más bajos de componentes antigénicos en el medio ambiente pueden explicar este hecho.
¿Cómo controlar los síntomas de las alergias a perros y gatos?
La principal herramienta para prevenir y controlar los síntomas relacionados con las alergias a las mascotas es evitar el contacto con ellas tanto como sea posible. Por tanto, si hay algún perro o gato en el hogar que provoque este síntoma, debes considerar dárselo a familiares o conocidos.
Al reducir el contacto con mascotas patógenas, su rendimiento debe reducirse gradualmente. Sin embargo, debido a la fijación y el transporte de partículas en el aire o la ropa, es imposible eliminar por completo el contacto con los animales fuera de la casa.
Por otro lado, existen algunos métodos médicos y farmacológicos que se pueden utilizar para controlar los síntomas de la alergia:
- Antihistamínicos.
- Congestión.
- Corticoesteroides
- Modificador de leucotrienos.
Cuando fallan otras reacciones, un método bien conocido para tratar estas reacciones es la inmunoterapia. Esto incluye la aplicación gradual de vacunas alergénicas, que aumentarán gradualmente la dosis hasta que el cuerpo desarrolle inmunidad.
Estilo de vida y consejos para mascotas
En la mayoría de los casos, el apego de la familia al ganado les impide estar continuamente expuestos a sus alérgenos. En estos casos, se recomiendan cambios de estilo de vida para ralentizar y evitar síntomas y complicaciones.
Entre las recomendaciones de cuidado personal proporcionadas por la Academia Estadounidense de Asma, Alergia e Inmunología, se destacan los siguientes puntos:
- Mantenga a las mascotas alejadas de las habitaciones abarrotadas de personas con alergias. Esto limitará la propagación y el contacto con partículas separadas.
- Evite el contacto con los animales mediante caricias, besos o abrazos. Si lo hace, se recomienda lavarse las manos con abundante agua y jabón.
- Use purificadores de aire de partículas de alta eficiencia (HEPA) en diferentes habitaciones de la casa. Reducen la cantidad de alérgenos en el aire.
- Utilice una aspiradora de gran capacidad para limpiar la casa con regularidad.
- Bañe a su mascota continuamente, al menos una vez a la semana, para reducir la liberación de caspa y células.
Prevención y cuidado de mascotas
Los síntomas de alergia a perros y gatos pueden aparecer en cualquier momento de la vida. Algunos pacientes mostrarán reacciones en la infancia, así que tenga cuidado con cualquier síntoma impactante que requiera atención inmediata.
Asimismo, no se deben subestimar los antecedentes personales o familiares de alergias a alimentos, medicamentos u otros elementos. En este caso, se recomienda limitar la exposición a nuevas sustancias o nuevos entornos y planificar seguimientos médicos periódicos.